Es increíble como por histórico escuchamos que nuestros “vecinos” americanos van unos cuantos años por delante, y sin querer caer en el tópico, he de reconocer que en el ámbito del Coaching, también nos llevan la delantera.
El otro día comentando con un compañero Coach analizábamos las diferencias de situación dentro del crecimiento personal, mientras que en otros países se habla de una forma natural como lo harías de tu médico o peluquero o ¿Quién es tu coach? Aquí aún en nuestro entorno en muchas ocasiones cuando me preguntan a que me dedico, tengo que buscar la formula para que se entienda de una forma clara y directa que es lo que hago y que beneficios conlleva.
Hace tiempo llegue a la conclusión que la mejor forma de explicar mi trabajo eran mis propios clientes, y es un acuerdo al que llego finalizado nuestra relación profesional:
“Si te he ayudado, cuéntalo”.
“Si has mejorado en tu rendimiento profesional, cuéntalo”
“Si has logrado una satisfacción personal y una mejora en tus relaciones políticas, cuéntalo”
Y cuenta que lo hiciste con tu Coach.
He de confesar que hoy, cuando estés leyendo este articulo, es mi 40 cumpleaños. Cuarenta años de experiencias vividas, dónde con el tiempo he aprendido que me queda mucho por aprender.
He aprendido, que cada vez que quieres algo nuevo en esta vida, es necesario crear el espacio necesario para incorporarlo, de hecho no es importante lo que eliminamos, pues no deja de ser material y aquello que buscamos llega desde la energía del querer.
He aprendido, que las cosas simples aportan más satisfacción que la propia imaginación del querer querer, sin saber apreciar lo que uno tiene.
He aprendido, que he llegado a este punto del camino, acompañada de gente a la que quiero, y de gente que se quedó, y que sin saberlo, sigo queriendo.
He aprendido, que hay valores que mantenerlos me han fortalecido y que otros me han hecho sufrir.
He aprendido, que una sonrisa me ha abierto todas las puertas, y aun hoy sigo sonriendo.
He aprendido, poquito a poco, que la vida son 1440 minutos diarios, y que me quedan otros tantos por vivir.
He aprendido, que acompañar a las personas es mi vocación, y por ello te pregunto
Y tú, ¿Todavía no tienes tú Coach?
Cuídate……..
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